Jamás te descargues una app espía. Son un peligro para tus cuentas
Las aplicaciones espía no solo vulneran la privacidad ajena, también exponen tus propios datos. Varios desarrolladores han sufrido hackeos masivos con miles de usuarios comprometidos

Las aplicaciones de espionaje no solo vulneran la privacidad de las personas vigiladas, sino que ponen en jaque la seguridad de quienes las instalan. Los datos interceptados acaban en servidores sin protección adecuada y, de ahí, directamente en manos de delincuentes que los utilizan para extorsionar o robar identidades entre toda una plétora de delitos digitales.
Según TechCrunch, varias compañías dedicadas al desarrollo de "stalkerware" han sufrido hackeos masivos en las últimas semanas. Sus bases de datos, repletas de información personal robada, han quedado expuestas en foros clandestinos donde cualquiera puede acceder a los chats privados y datos financieros capturados.
Riesgos de seguridad que afectan a todos los implicados
Nadie espera que la app que instaló para espiar a su pareja acabe filtrando sus propias conversaciones. Las personas que recurren a este tipo de software raramente piensan en las consecuencias, pero lo cierto es que estas aplicaciones capturan absolutamente todo lo que pasa en el móvil y lo envían a terceros sin ningún control.
Los creadores de stalkerware montan sus negocios en países donde apenas hay regulación y no invierten un euro en proteger lo que roban. Este problema no es nuevo, y ya en 2023 un hackeo obligó a una empresa de software espía a cerrar permanentemente tras exponerse los datos de más de 13.000 dispositivos, incluyendo mensajes privados y ubicaciones de personas completamente ajenas a la instalación del software.
Resulta casi cómico que estas apps capturen tanto información personal como profesional. Cuando alguien espía a su pareja que trabaja en una empresa con datos sensibles, no solo está obteniendo fotos o mensajes, también está provocando una brecha de seguridad corporativa que podría costarle el puesto a la víctima y millones a la compañía.
Lo más irónico de todo este asunto es que quienes instalan el software acaban dejando un rastro digital inequívoco. Al caer los servidores, los atacantes no solo ven lo que tú espiabas, sino que obtienen tu correo, método de pago y hasta la IP desde donde controlabas la app, convirtiendo al espía en objetivo perfecto para extorsiones.
En febrero de 2024, Google empezó a bloquear apps externas que abusan de permisos para leer códigos OTP y espiar a usuarios. Esta medida ha provocado que muchos desarrolladores de stalkerware busquen canales alternativos de distribución, como tiendas no oficiales o incluso mensajería instantánea.
Meterse en estos jardines tiene consecuencias penales que poca gente contempla. La legislación española no se anda con chiquitas cuando hablamos de vulneración de la intimidad, y las multas pueden superar fácilmente los 50.000 euros en casos graves, sin contar posibles penas de cárcel cuando hay menores implicados o situaciones de violencia de género.
Si realmente necesitas compartir ubicación con familiares, existen opciones perfectamente legales. Plataformas como Telegram, que se actualizó en agosto de 2024 con mejoras de seguridad, ofrecen funciones para compartir ubicación temporalmente sin comprometer la privacidad del resto de comunicaciones ni instalar software adicional.
Los especialistas recomiendan revisar regularmente las aplicaciones instaladas y sus permisos. Las vulnerabilidades aparecen incluso en software legítimo, como demostró un fallo en apps de Microsoft que permitía espiar a usuarios de macOS a través de sus webcams y micrófonos sin consentimiento, situación que exige mantenerse siempre alerta ante comportamientos sospechosos.
Ninguna relación sana se construye sobre la desconfianza y el control. Además de ser éticamente reprobable, el uso de apps espía pone en riesgo tu propia seguridad digital. La próxima vez que te tienten con la idea de "solo voy a echar un vistazo", recuerda que podrías estar entregando tus datos a delincuentes que no dudarán en usarlos contra ti.