Estados Unidos sacude la fusión nuclear para siempre con este increíble reactor
Commonwealth Fusion Systems construirá en Virginia la primera planta comercial de fusión nuclear conectada a la red eléctrica, marcando un hito histórico en la producción de energía limpia

Commonwealth Fusion Systems (CFS), una prometedora startup surgida del MIT, ha dado un paso histórico en la carrera por la energía limpia del futuro. La empresa ha anunciado la construcción del primer reactor comercial de fusión nuclear que se conectará a la red eléctrica en el Parque Industrial James River, ubicado en el condado de Chesterfield, Virginia.
El proyecto, bautizado como ARC, aspira a revolucionar el panorama energético mundial desde principios de la década de 2030. Según informa Interesting Engineering, el reactor será capaz de generar 400 megavatios de electricidad, suficiente para abastecer a unos 150.000 hogares, marcando un antes y después en la historia de la energía.
La fusión nuclear promete transformar para siempre nuestra forma de producir energía
Esta tecnología representa un salto gigantesco respecto a los actuales reactores de fisión, ya que aprovecha el mismo proceso que ocurre en el núcleo del Sol. La fusión nuclear utiliza combustibles abundantes como el hidrógeno y los isótopos de litio, que se pueden obtener fácilmente del agua del mar, sin generar residuos tóxicos ni emisiones dañinas.
Antes de que ARC entre en funcionamiento, CFS está ultimando SPARC, su máquina de demostración en Massachusetts. Este proyecto intermedio será crucial para probar la viabilidad de la tecnología, esperando producir su primer plasma en 2026. El éxito de SPARC allanará el camino para que ARC pueda comenzar a suministrar energía a la red a principios de la década de 2030.
La construcción de ARC no solo promete revolucionar el sector energético, sino que también generará miles de millones de dólares en desarrollo económico para la región. Aunque los mini reactores nucleares domésticos ya están en desarrollo, este proyecto marca un hito sin precedentes en la historia de la energía comercial.
El mayor desafío al que se enfrenta CFS es lograr la ganancia neta de energía, es decir, producir más energía de la que consume el proceso. Para conseguir la fusión nuclear, se necesitan temperaturas extremadamente altas, incluso superiores a las del núcleo del Sol. La compañía ha firmado un acuerdo de colaboración con Dominion Energy Virginia, actual propietaria del terreno, que aportará su experiencia técnica y desarrollo al proyecto.